El estudio Chevallier Architectes ha diseñado dos chalets en la zona de Chamonix-Mont-Blanc, en los Alpes franceses. A la base de hormigón con detalles en piedra, se une una primera planta en madera y una buhardilla de techos inclinados en metal, que encierran los dormitorios principales.
La mezcla de materiales supuso un ingenio para garantizar la estanqueidad y un buen aislamiento. Además, incluye un área de bienestar, como una sauna, hamam y spa, todos alimentados por energía geotérmica para reducir el consumo de energía. Una combinación de materiales que realza la estética final del proyecto al tiempo que refleja un estilo personal.